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LLAMAS ADENTRO
en ocasiones me prendo. a lo bonzo. con llamas adentro. bolsa de hielo y lluvia. debería de aprender de aquellos que usan el arte del disimulo sueco, del enfriamiento. y aguardan. esperan su momento. con rabia inactiva pero latente. con cartilla de racionamiento. no puedo leer todos los libros de la biblioteca pero lo parece. enfríar la emoción. detenerla, prou. time out o lo que sea. no siempre es posible pero se intenta. a veces no es tan decisivo lo que se dice como el cómo se dice. cuestión de enfoque y cuidado. estar en el otro. la determinación libera de la emoción. enfría. es una bolsa de hielo. como la lluvia, que libera de la tensión creada en el ambiente del agua evaporada.

ALEGRÍA
salgo con una amiga. mi amiga. ya por necesidad y a pesar de, al final de la semana. siempre me río con ella hasta niveles pasmosos. hasta llegar al paralís y la trombosis. alegría, claro, unas cañas frescas, algo para picar y mucho para hablar. están de moda las barbas. será la crisis, porque ellas, nosotras, nos dejamos el pelo largo también, en la cabeza, solo en la cabeza. de camino a casa, algo nublada y muy contenta, recorriendo las pocas calles de la ciudad, con poca gente y muchas luces, veo chicos con barbas y pelos largos, no muy largos, un poco. muchos. me dan más confianza lo que llevan el pelo rapado. rapados no, mejor hasta quedarse calvos, la cabeza despejada para pensar, están ahí para decir lo que piensan, no, mejor, para decirlo sin recorteces, incluso aquello que no se espera de ninguna forma, dejando la tontería atrás, muy atrás. qué poder tiene el pelo que los vuelve ágrafos. 
 
UN POCO FELIZ
voy a la biblioteca, no lo demoro más. el solo hecho de pensar que estoy yendo, que voy y estaré un rato allí, me hace un poco feliz. he comprado otro libro a pesar de. llevas la bolsita de la librería con tiempo para vivir dentro, como aquel amigo que siempre la llevaba colgando de la mano y lo iban a operar para estirpársela. en la biblioteca paso un rato largo, buscando libros que ya están prestados. pero a cambio encuentro otros sin buscarlos. concentrada subo las escaleras. otra planta. allí no busco, ahí encuentro y siempre algo que me transporta a un tiempo distinto. la carnicería de bastien vivés. otro tiempo, otro espacio, otro ritmo. lápices de colores, planos, luz, trazos, me diluyo. el tiempo narrativo es casi real, se expande, se encoge, se mueve, se respira, sientes el chicle. nunca-sentí-nada-igual leyendo un cómic.